viernes, 7 de octubre de 2011

Un caso policíaco


Un día un detective estaba mirando los casos cumplidos e incumplidos, entonces vio un caso muy reciente de aquel mismo día entonces se puso a investigarlo. Fue a la casa donde se había cometido el asesinato, le preguntó a la señora que había pasado, aquella mañana ella le explicó que se fue al jardín a tomar el aire y cuando volvió a entrar vio a su marido muerto pero sin sangre y los detectives se pusieron a investigar el caso. Salieron a la terraza y vieron unas huellas llenas de barro que siguieron hasta una cueva. Cuando entraron a la cueva vieron que estaba llena de armas, entonces salieron y llamaron a los policías, a los anti disturbios, a unos militares, a la FBI y a las fuerzas armadas. Les dijeron que fueran hasta allí sin sirenas para que no se enteraran cómo llegaban. De golpe estaban todos en la cueva, empezaron a entrar y vieron a treinta etarras armados etiquetando a los que ya habían matado. Los policías entraron en la cueva y los detuvieron, les fueron a poner las esposas y todos se fueron corriendo y de golpe salieron veinte etarras más de unos escondites, los etarras empezaron a disparar. Entonces los que estaban a favor de los detectives también empezaron a disparar y en aquella cueva hubo un masacre de personas, salían tiros de todos los lados y murieron todos los etarras pero también cinco policías. Los detectives ya dieron el caso por terminado, desde aquel momento los de la ETA entonces sí que estaban condenados para toda la vida. Y desde aquél momento los detectives pusieron…
¡CASO CERRADO!

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola, Adrià, bienvenido al blog. La redacción tenía que tratar de un misterio relacionado con un código. Veo que en esto te has despistado.
Por otro lado, íjate que he subrayado en rojo las faltas, corrígelas. Has de entrar en EDITAR ENTRADAS. Cuando lo hayas hecho, te pondré la nota.